miércoles, 8 de junio de 2011

Cómo nace la propuesta


La era de la industrialización ha comportado grandes avances tecnológicos, los cuales han afectado en gran medida los procesos constructivos y las técnicas de edificación. La producción en serie de elementos prefabricados ha facilitado el proceso de la puesta en obra, pues acorta los tiempos de ejecución y aumenta la precisión del montaje.
Aunque la construcción industrializada ha estado presente durante el Siglo XX y el XXI, incentivada por los impulsos de la revolución industrial, de la reconstrucción después de las guerras o por la necesidad de adaptarse a los nuevos tiempos, y ha representado una gran ventaja en la economía de los tiempos y la precisión en obra, se ha de reconocer que todavía no ha logrado suficiente aceptación y arraigo. Esto tal vez se deba a cierta reticencia por parte de la sociedad a cambiar los métodos constructivos tradicionales (en los que de alguna manera confía y está acostumbrada), a la falta de una mayor investigación y desarrollo al respecto o simplemente por razones económicas del mercado inmobiliario y de la construcción.
En la actualidad, las construcciones modulares suelen venir total o parcialmente ensambladas desde fábrica. Generalmente presentan estructuras rígidas soldadas, las cuales se revisten con paneles prefabricados que aíslan en relativa medida el interior. Para su transporte y montaje requieren de grúas y transporte pesado. Para su instalación, precisan de una cimentación y preparación previa del terreno  (excavación y allanado), siendo estas cuestiones adicionales y ajenas a la propia construcción modular.
Por otra parte, las construcciones modulares generalmente requieren de personal especializado para su instalación, no existiendo en la actualidad construcciones modulares que puedan ser trasladadas, montadas o modificadas totalmente in situ, con medios sencillos, por el propio usuario.
La concepción y el hecho de construir se consideran hoy día tareas de especialistas (ingenieros, constructores, arquitectos), en las que el ‘cliente’ es un mero espectador y ocupante. Sería conveniente que existiesen medios mucho más participativos por los cuales los usuarios, dependiendo de sus gustos y necesidades -muchas veces cambiantes-, contasen con sistemas seguros que les permitiesen construir por ellos mismos. De esta manera, la construcción podría convertirse en algo flexible, transformable por el propio destinatario. Resultaría similar a como sucede hoy día con cierto tipo de muebles, que con unas cuantas pautas y herramientas los puede trasladar y montar el propio usuario.

2 comentarios:

  1. Hola,

    encuentro muy interesante este sistema. Soy arquitecta y una estudiante de PhD de Barcelona. Estudio las cimentaciones de edificaciones 3D modulares en vivienda construídas estos últimos años en Cataluña. Me gustaría recoger tu proyecto en mi tesis. He encontrado info en internet pero tengo algunas preguntas de cómo son los cimientos. Te agradecería mucho si me pudieras dar un email o un telefono que te pueda llamar por skype o una persona que me pudiera explicar cómo son. Muchas gracias. Ester Pujadas

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  2. Me consta que se construyó el prototipo una vey y en la Salle en el 2011. Se ha construído otras veces. Te agradecería mucho que te ponieras en contacto conmigo a espugi@gmail.com.

    Muchas gracias,
    Ester Pujadas

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