miércoles, 8 de junio de 2011

Variedad de formas

A pesar de que este sistema está sustentado sobre la base de la estandarización de todas sus partes, mediante sus múltiples combinaciones se pueden lograr una gran variedad de formas. Se trata de una de las virtudes de los sistemas modulares que han sido poco explotadas, pues estos tienden a caer en construcciones monótonas, homogéneas y repetitivas. El sistema se puede convertir así en una especie de juego de composición, tipo Lego o Mecano.
El sistema presenta una gran flexibilidad para agregar, desmontar o modificar módulos. Estos se pueden adherir por cualquiera de sus caras y los cerramientos se pueden remover o intercambiar, según los gustos y necesidades del usuario, sin afectar la estructura principal.

Mediante el presente sistema, no solo se pueden obtener prismas, tipo cajas, sino también construcciones más complejas, como poliedros, mallas espaciales, cerchas, etc. (fig. 19 y 20). Es a partir de la combinación de varios tipos de nudos y perfiles que se puede obtener una gran variedad de formas de los módulos.
Si se requiere reforzar la estructura, se pueden utilizar tensores a través de los circuitos de ventilación de las cámaras.
Las instalaciones pueden ir expuestas por la cámara de ventilación o embebidas en los cerramientos.
Este sistema modular resulta de fácil mantenimiento, pues se pueden desmontar los cierres para la inspección, así como reponer o cambiar las partes en caso de averías o deterioros sin comprometer el resto de la edificación.

Climatización por medios naturales.

 El aislamiento térmico de las construcciones modulares suelen ser paneles, tipo sándwich, los cuales resuelven en relativa medida la transmisión de temperaturas del exterior al interior. En la mayoría de los casos, la climatización se resuelve mediante aparatos eléctricos de calefacción y refrigeración, lo cual representa un añadido a la propia construcción y un aspecto negativo en cuanto el consumo energético.
Esta propuesta emplea un sistema de cerramiento variable que se adapta, mediante medios naturales, a las temperaturas externas, sin tener necesidad de recurrir, salvo en condiciones extremas, a aparatos eléctricos de climatización, por lo cual representa un aporte a la sostenibilidad de los recursos y al ahorro energético.
El sistema consiste en un doble cerramiento, uno interior (10) y otro exterior (11), y en medio una cámara de aire (12) que puede ser ventilada o estanca a voluntad mediante unos postigos (aletas abatibles) ubicados en las cantoneras de los módulos (13). Cuando los postigos están abiertos (en situación de calor), permiten abrir un circuito de ventilación de aire que corre por las cámaras y el interior de los módulos, refrigerando la construcción y su interior. Cuando los postigos se cierran (en situación de frío), cortan el circuito y aíslan doblemente el interior (figuras 9, 10 y 11).
Es de anotar que los nudos y la estructura secundaria presenta perforaciones que contribuyen al paso de la corriente eólica.

Transporte y montaje manual de todas las piezas

La mayoría de las construcciones modulares se ensamblan parcial o totalmente en fábrica y se trasladan y montan mediante transporte y maquinaria pesada.
Este sistema, por su mecanismo de ensamblaje y las características de sus partes, permite el transporte y el armado in situ de manera manual. Las piezas se embalan en contenedores pequeños o medianos y se transportan por medios mecánicos o animales y se montan manualmente mediante unas herramientas básicas y una guía de instrucciones.
Este tipo de montaje hace que esta construcción sea útil, sobretodo, para atender situaciones de emergencia, flexibilidad y movilidad, en lugares de difícil acceso o escasos medios mecánicos.
Todas las piezas se ensamblan mediante tuercas y tornillos, no requiere soldaduras, lo cual representa una gran flexibilidad en el armado y la posibilidad de reponer o intercambiar las piezas.
El sistema cuenta con una estructura principal, que es la encargada de soportar el conjunto de la construcción, y una estructura secundaria, la encargada de soportar los cerramientos.

Adaptación de los módulos al terreno.

Generalmente, las construcciones modulares requieren de excavación, nivelación y en otros casos de una cimentación previa, lo cual representa que la preparación del solar es un aspecto adicional y ajeno al de la propia construcción modular.
Este sistema consta de unas bases que nivelan los módulos sobre el terreno, independientemente de su inclinación, evitando de esta manera las excavaciones y la nivelación. Puesto que se trata de una construcción ligera, es posible que, si el terreno es lo suficientemente firme, no se requiera de cimentación, o en caso contrario, unos simples dados o una placa de hormigón bastarían de soporte a la edificación.



MECANO SYSTEM Lanzamiento

PRINCIPALES CARACTERÍSTICAS
    El sistema Mecano resulta útil, sobre todo, para atender situaciones de catástrofes, donde no haya medios eléctricos o mecánicos, donde se quiera construir rápido y seguro o se trate de construcciones temporales; pero también se puede utilizar en condiciones normales y permanentes. Puede albergar diversos usos, como vivienda, escuelas, oficinas, centros de salud, etc. El sistema cuenta, principalmente con las siguientes ventajas:
    Ligereza. Emplea elementos ligeros de producción industrial.

    Fácil adaptación al terreno. Tiene unas bases extensibles que se acomodan a los desniveles del terreno, por lo tanto no requiere de nivelaciones ni movimiento de tierras.

    Poca o ninguna cimentación. AL ser ligero, no requiere de grandes cimentaciones, unos simples dados de hormigón, incluso una superficie flotante, pueden servir para apoyar los módulos

    Fácil de ensamblar. No precisa de transporte, equipos o maquinaria pesados. Un par de operarios no especializados, con un manual de instrucciones y herramientas sencillas, puede levantar un módulo (30m3) en un día.

    Versatilidad. Se puede montar, desmontar, trasladar, ampliar, reducir o modificar fácilmente. También puede adoptar múltiples formas.

    Sostenibilidad. Presenta un sistema de cerramientos variable que se adapta a las condiciones climáticas.

    Economía. Puesto que utiliza piezas normalizadas de industria, no requiere movimientos de tierras y muy poca cimentación, tampoco requiere transporte ni maquinaria pesada, ni especialistas; y además ahorra energía.

    Cómo nace la propuesta


    La era de la industrialización ha comportado grandes avances tecnológicos, los cuales han afectado en gran medida los procesos constructivos y las técnicas de edificación. La producción en serie de elementos prefabricados ha facilitado el proceso de la puesta en obra, pues acorta los tiempos de ejecución y aumenta la precisión del montaje.
    Aunque la construcción industrializada ha estado presente durante el Siglo XX y el XXI, incentivada por los impulsos de la revolución industrial, de la reconstrucción después de las guerras o por la necesidad de adaptarse a los nuevos tiempos, y ha representado una gran ventaja en la economía de los tiempos y la precisión en obra, se ha de reconocer que todavía no ha logrado suficiente aceptación y arraigo. Esto tal vez se deba a cierta reticencia por parte de la sociedad a cambiar los métodos constructivos tradicionales (en los que de alguna manera confía y está acostumbrada), a la falta de una mayor investigación y desarrollo al respecto o simplemente por razones económicas del mercado inmobiliario y de la construcción.
    En la actualidad, las construcciones modulares suelen venir total o parcialmente ensambladas desde fábrica. Generalmente presentan estructuras rígidas soldadas, las cuales se revisten con paneles prefabricados que aíslan en relativa medida el interior. Para su transporte y montaje requieren de grúas y transporte pesado. Para su instalación, precisan de una cimentación y preparación previa del terreno  (excavación y allanado), siendo estas cuestiones adicionales y ajenas a la propia construcción modular.
    Por otra parte, las construcciones modulares generalmente requieren de personal especializado para su instalación, no existiendo en la actualidad construcciones modulares que puedan ser trasladadas, montadas o modificadas totalmente in situ, con medios sencillos, por el propio usuario.
    La concepción y el hecho de construir se consideran hoy día tareas de especialistas (ingenieros, constructores, arquitectos), en las que el ‘cliente’ es un mero espectador y ocupante. Sería conveniente que existiesen medios mucho más participativos por los cuales los usuarios, dependiendo de sus gustos y necesidades -muchas veces cambiantes-, contasen con sistemas seguros que les permitiesen construir por ellos mismos. De esta manera, la construcción podría convertirse en algo flexible, transformable por el propio destinatario. Resultaría similar a como sucede hoy día con cierto tipo de muebles, que con unas cuantas pautas y herramientas los puede trasladar y montar el propio usuario.